So What

Obra cumbre del jazz, y probablemente de toda la música de todos los tiempos, Kind of Blue ha cumplido 50 años en un estado de forma excepcional. Prueba irrefutable de la extraordinaria transcendencia de ese álbum, fraguado en unas circunstancias irrepetible: un Miles Davis en estado de gracia, en plenitud física y expresiva, flanqueado por un quinteto de excepcionales músicos (Julian "Cannonball" Adderley al saxo alto, John Coltrane al saxo tenor, Winton Kelly y Bill Evans al piano, Paul Chambers al contrabajo, Jimmy Cobb a la batería), que parecen inspirados por una mano celestial. El trompetista más conocido de la música popular concluye con Kind Blue su década dorada, que empezó con su debut, Birth of the Cool (1949), y después de infilar media docena de discos mágicos e imprenscidibles -Miles Ahead, Ascenseur por l'echafaud (banda sonora de la película homónima de Louis Malle), Milestones, 'Round about Midnight, Sketches of Spain, Porgy and Bess. El acta de fundación de la nueva manera de entender el jazz, que Davis ha estado ensayando y perfeccionando en los discos anteriores, tuvo su momento álgido en esta obra maestra: la que vino a popularizarse con el término de improvisación jazz, llevando el desafío hasta la improvisación colectiva de todo el sexteto, a partir del concepto de jazz modal. Los músicos disponen de una gama o serie de gamas, llamados modos, (en lugar de unas secuencias de acuerdos o de harmonías) a partir de la cuales improvisan la interpretación, combinándola con el conjunto. El resultado está a la vista de todos: "este disco debe haberse compuesto en paraíso", explica Jimmy Cobb. Talento y tesón.